sábado, 27 de diciembre de 2003

Tocar el cielo
Feliz Navidad...

El hombre tocó los cielos cuando el Sputnik comenzó a dar vueltas alrededor de la Tierra. Aquello nos hizo sentirnos pequeños, observados y frágiles, asomados con una pequeña radio a la inmensidad del océano cósmico. El Sputnik siempre me ha parecido la perfecta estrella de Belén, la marca indeleble de la voluntad rompiendo la noche, el cometa perfecto creado con nuestras propias manos.

Este año tratamos de llegar de nuevo Marte. Y sin fracasar la sonda quedo en el oxidado plantea, lejana y sola, inalcanzable a nuestros ruegos, y nosostros, desconsolados, sin poder escuchar su sonido.

Sin embargo, el Sputnik, el pequeño satélite, que Korolev construyó y regaló al mundo, giró y giró unos cuantos meses, con sus antenas como cola, transmitiendo un pequeño pitido desde las estrellas, dando la vuelta a la Tierra cada poco más que hora y media, e hizo que las navidades del año 1957 tuviesen un sobrecogimiento y una sensación diferente que acabaría pocos días después de Año Nuevo al querer volver a casa, un 4 de enero, quemándose en el intento. Él nos demostró que se pueden conquistar los cielos, como tantas otras cosas. Feliz Navidad, Feliz Año a todos.

Aquí les dejo el sonido del Sputnik cuando todavía rodeaba la Tierra.

lunes, 22 de diciembre de 2003

Ritos de solsticio
Un jardín parabólico

El jardín, con la llegada de los últimos días del otoño es un lugar de negro augurio. El frío se vuelve más intenso, cortante y feroz; la tierra parece marchita y estéril, y las plantas y árboles que algún día le dieron esplendor caen en una desnudez sin hojas en lo que parece un presagio del fin de los días, de una decadencia irremisible hacía la oscuridad que ciñe, cada vez con más fuerza, la tarde. El sol es un astro apagado que a duras apenas ilumina los días entre la lluvia y las primeras nieves, una estrella lejana cuyo calor ya no llega. El paseo, pues, es motivo de reflexión sobre la huidiza felicidad, lo pasajero de la existencia, el fin de todo lo hermoso que se ha conocido. Hasta que al regreso se enciende la televisión que vuelve para explicarlo todo de nuevo.

Lejos del cielo y libres de la intemperie, el hombre moderno apenas siente de manera consciente el paso del tiempo por medio de los ciclos que la naturaleza siempre le había marcado. Apenas sabe en qué fase se encuentra la luna a día de hoy, en qué momento comienza el invierno o tan siquiera en qué estación se haya. La conexión con el medio natural se ha reducido a su mínima expresión y así se vive en una inconsciencia artificial en la que se desconoce lo más esencial y quizás más importante. Un estudio no demasiado lejano señalaba que la media que un español se encontraba a diario al aire libre había pasado de menos de cuatro horas a poco más de veinte minutos en los últimos treinta años. No se hablaba del tiempo que se pasaba fuera de casa, sino del tiempo que se estaba en la calle no sólo con la intención de compartir unas cañas. Son esos veinte minutos apenas que van del portal al coche o al autobús, y de la estación o del garaje al trabajo y viceversa, esos veinte minutos, como el periódico gratuito del metro, que caminamos bajo el firmamento, solos frente a la naturaleza, sea urbana o rural. Ajenos, por escaso contacto con la intemperie, a los ciclos, al tránsito de las estaciones, lo exterior ha de resultarnos extraño y sus cambios, escaso motivo de interés; apenas lo suficiente para ver la previsión meteorológica y decidir si lo oportuno es el abrigo o la gabardina para el día siguiente.

Sin embargo, las cosas, aunque nos lo parezcan, no son así, y las consultas de los psicólogos y los psiquiatras están, en estas fechas, llenas de gentes, quizás los más débiles o los más influenciables, aquejados de una infinita congoja, un tristeza laxa y en ocasiones desesperada, que no es si no el reflejo de lo que ocurre en el mundo natural. Y es este el momento en que la televisión debe llegar al rescate con el conocimiento y la sabiduría que la sociedad ha depositado en ella para que la guarde y preserve del olvido, para que el espíritu navideño, tan denostado a veces, venga a redimirnos de la tristeza, de la oscuridad, del otoño.
(.../..)

¿Y qué es la Navidad? Sí, se sabe. Se sabe que la Navidad no es una fiesta religiosa cristiana ni una celebración pantagruélica. Se sabe que no es el cumpleaños de un salvador ni un certamen de villancicos. Se sabe que la Navidad no son los aspectos culturales que se presentan en forma de turrones, cavas, capones, arcos de bombillas, árboles con bolas, belenes, regalos y compras. Se sabe que la Navidad es la esperanza, la fe en un futuro mejor, la confianza en la llegada de la felicidad, el anhelo de la paz. Si el frío llega, el jardín se marchita y el sol parece que vaya a morir, y sin embargo, el día del Solsticio resurge, maravilla, en mitad del frío y conquista minuto a minuto a la oscuridad de la noche... si asistimos al más imposible e increíble de los milagros que es que el sol renazca, que lo que iba a morir venza, ¿cómo no vamos a confiar en el futuro? ¿cómo no vamos a creer en la felicidad? ¿cómo no vamos a esperar que exista un mundo mejor y más justo? (sigue)

lunes, 15 de diciembre de 2003

La lejana rosaleda
Un jardín parabólico

Un jardín, cualquier jardín, es, como casi todo lo bello o lo artístico superfluo, al menos, en una primera observación. Nada o poco se puede sacar de aquello que sólo sirve para el gozo o el disfrute intelectual, y por tanto poco aporta a la mejora de las condiciones de vida de los seres humanos y de las sociedades. Así, como ejemplo de la plusvalía o de la explotación, el lujo, en sus formas, también toma aspecto en el jardín, tierra improductiva, exceso, y finalmente, ejemplo de poder y despreocupación de aquellos que pueden y quieren invertir sus recursos en el mantenimiento de lo que es hermoso para su disfrute o como muestra última de su potestad sobre la tierra, esa, de la que se obtiene el alimento, despreciándola, dedicándola a la suntuosidad. La tierra que conforma el jardín se convierte en exceso y pompa, al ser, en la mayor parte de los casos, sus beneficios, de nuevo, lujo, sistema de simbólico con lenguaje propio, al que sólo pueden acceder y disfrutar de él de manera plena quienes han tenido la oportunidad, mediante la cuna o el estudio, de conocer el significado de su discurso. (sigue)

martes, 2 de diciembre de 2003

El revés de la trama
Un jardín parabólico

El cuidado de un jardín acaba exigiendo dedicación y cuidado, cosa sabida. Una vez definido el espacio físico, y su significado con respecto al conjunto, es necesaria la tala en el parterre, la limpieza de rastrojos, y sobre todo, el arrancar con constancia las malas hierbas que aparecen en las distintas partes, para no arruinar el conjunto. La vigilancia se vuelve costumbre, y lejos de llevar al que esa responsabilidad tiene a la paranoia, es la meticulosidad la consigue el aspecto deseado, cuyo objetivo es una belleza despreocupada y ajena, a los ojos del paseante, del trabajo que se ha llevado a cabo para obtener los resultados que aparecen a la vista para el disfrute. Del jardín, al final, lo único que importa, es la armonía del conjunto y no el trabajo que ha llevado conseguirlo o las técnicas que han sido utilizadas para ello, materias ambas que no importan para quien del jardín disfruta, y que nunca deben de ser necesarias para que el regocijo sea oportuno. (sigue)

martes, 25 de noviembre de 2003

Crítica de la razón crítica
Un jardín parabólico

El observar la realidad con un cierto pensamiento escéptico puede llevar consigo una merma en la siempre positiva capacidad de asombro, esa que consigue que la ilusión por lo nuevo, lo posible, regrese a nuestro rostro. Sin embargo, esa posición levemente recelosa con lo que ocurre, se ve, se escucha, se observa, trae como consecuencia una cierta inacción que puede ser tachada de conformismo. Serán cosas del invierno que ya se siente, o de las escasas horas de luz de los últimos días de noviembre en este jardín al que la noche llega con una premura imprevista, que cubre las formas con las sombras de la tormenta y el aire boreal, y que no permite atisbar más allá de lo que deja la menguada razón o pensamiento, más triste que oscuro, y en que se alberga poca esperanza, en vista de cómo vienen las cosas... (sigue)

martes, 18 de noviembre de 2003

Tiempo de Marte
Un jardín parabólico

No resulta difícil imaginar un jardín en Marte. Bajo un atmósfera tenue y rala, un cielo de luz de mercurio, uno se imagina en el futuro a un torpe astronauta con un pequeño rastrillo tratando de ordenar la naturaleza helada y roja, arando la arena fría, de tintes oxidados, y colocando, en equilibrio zen, alguna roca limada por las tempestades e ubicando, quizás, una roca meteórica, más oscura, en un conjunto sin duda yermo, y que es igual al que lo rodea, pero distinto, al estar cambiado por la voluntad y la búsqueda de la belleza. Marte es un lugar desapacible, pero seguro hermoso... (sigue)

martes, 4 de noviembre de 2003

Regreso

Hoy me encontrado, entre los restos del naufragio de mi PC, este texto de finales de febrero de este año. Sigo pensando lo mismo, pero ahora con más intensidad. Sí, anuncio mi regreso. Iré actualizando la página poco a poco y avisando por correo o mensaje en una botella a aquellos que frecuentaban estas costas.

Quién haya llegado aquí buscando un Jardín Parabólico, este es el camino correcto. Para quien no, decirles que de aquí a siete días volveré. Mientras tanto aquí están mis Disconformidades, incoherencia y deseos de las que les hablaba...

"Estaba de un tiempo a esta parte incómodo con Mar Interior. La idea inicial con la que fue concebido, la de ser una "carta de navegación", un testigo de mi paso por la red con los comentarios e impresiones que ese recorrido había hecho en mí, no satisfacía los deseos diarios y se iba tornando más en obligación que en placer, y de ahí al desánimo y a la indolencia y a la más clara de las vagancias restaba un paso. Lo cierto es que las intenciones de un principio fueron, poco a poco, moderadas por el tiempo, la novedad y la necesidad. Y así, se me hacía menos preciso pasar muchas horas navegando por la red y más necesario compartir el mundo real, y dejar de lado el obligatorio deber del Mar Interior, al que ya sabía el tiempo, en minutos u horas, que iba a tener dedicarle cada vez que me proponía subir una nota digna. Cuando el que se compromete es uno mismo, pero el fruto de ello se muestra a los demás, es mejor no llevarlo a cabo a hacerlo mal, desganado o desabrido. La idea del respeto hacía quienes pudiesen leer estas líneas se imponía: antes el silencio que la necedad. Después, graves circunstancias personales, conocidas por muchos, obligaron a dedicar tiempo y esfuerzo a otros avatares, pero eso no exculpa un cierto abandono de unos meses a esta parte si no, más bien al contrario: el hecho de no hacerlo cuando la vida se complicaba demostraba que el Mar Interior era más carga que alivio.
Por otro lado, la red se iba haciendo a mis ojos cada día más aburrida o peor, banal, y de los pocos consuelos que se hallaban se desarrollaban fuera los comunes portales, y sí se centraban cada día más en las páginas personales, de algunos a los que llamo amigos y a otros compañeros. Así pues, vivía la incoherencia de querer continuar con Mar Interior pero sin mantener las reglas que me había impuesto, de vivir más y de contarlo, sin tiempo, de seguir en la red pero sin tener que soportar el aburrimiento que muchas veces me traía.
Finalmente creo haber llegado a un compromiso conmigo mismo que me satisface: escribir todos los días que pueda, comentar lo visto y oído, no preocuparme por las fotos, por los links (¿por qué no utilizar el término amarra?) y usar la primera persona con más naturalidad que modestia; al fin y al cabo, la razón de Mar Interior, que como diría Saramago, es un diario y como tal "una novela de un solo personaje", es contar, en primer término, de forma pública a quienes me conocen y están lejos, en qué empleo mi tiempo y si lo empleo bien. De nuevo, Saramago en su ‘bitácora impresa’ que son los Cuadernos de Lanzarote asegura que nadie escribe "un diario para decir quién es". Tampoco pienso mantener un blog para explicar eso, si no, tan sólo para entretenerme y de paso, si puedo, entretenerles a ustedes.
Creyente de las formas y las ceremonias, estoy en tránsito y en transformación, como ya anuncie, para que las intenciones aquí declaradas tomen forma visual, que no física, y los nuevos compromisos se mantengan. Quedo a su disposición."

lunes, 9 de junio de 2003

Aviso para navegantes

Tramo cerrado a la navegación marítima

La flota se encuentra amarrada a puerto

Ante el pasado descuido de este MarInterior, la Capitanía Marítima, dependiente del Almirantazgo con base en Innersea, ha decidido cesar en las actividades. Canal 16 VHF (Urgencias/Averías), Innersea maritime rescue OK.

Se están efectuando reparaciones que impiden continuar con la actividad marítima normal.

Les extraño a todos.

Próximamente avisaremos a nuestros amigos, favoritos y lectores cuándo regresaremos a la navegación

Lanzaremos botellas con mensajes en el interior, como buenos naúfragos.

Son ustedes estupendos.

(Ya cumplimos un año, pero se nos pasó....)



miércoles, 7 de mayo de 2003

A modo de explicación (o de disculpa)

Con permiso, a la manera de Paulanet

OBJ: Informe situación tras abandono temp de MarInterior por parte de M.C. su editor. TXT: Guerra, manifestaciones, protestas, televisión, 40 canales, ira, enfado, frustración, más enfado, Aznar, pero que Bush, pq está más cerca,avería eléctrica, cambio de instalación en todo la casa, obras, obras variadas, albañil, electricistas, técnicos en calefacción, operación de madre biónica, rodilla nueva, 17 días de hospital, más hospitales, revisiones propias y ajenas. RSM: Falta de tiempo. Pido disculpas. Les extraño, ya saben. FIN

miércoles, 16 de abril de 2003

La conocida baraja
George W. Bush es el 43er Presidente de los Estados Unidos. Asumió el cargo el 20 de enero de 2001 después de una campaña que planteó propuestas de gran envergadura...

"“Nuestra nación – esta generación – eliminará la amenaza siniestra de violencia que azota a nuestro pueblo y nuestro futuro. Consolidaremos al mundo a favor de esta causa por medio de nuestros esfuerzos, de nuestra valentía. No nos cansaremos, no vacilaremos y no fracasaremos”.

Declaraciones de George W. Bush extraído de su biografía oficial .

martes, 15 de abril de 2003

Conversación

No a la guerra. No a la invasión. No a los saqueos

"Oye, ¿quedamos? Podemos ir al Mac Donald's..."
"Sí, para quemarlo, no te jode".

Extraído de Memorial de la guerra de próxima publicación en este Blog.

Las palabras exactas

"Malditas sean las guerras y los canallas que las apoyan".

Declaraciones textuales de Julio Anguita, ex coordinador general de Izquierda Unida y ex alcalde de Córdoba (España) tras conocer el fallecimiento de su hijo, el periodista Julio A. Parrado, en una base de comunicaciones de los EE.UU. en Irak a consecuencia del impacto de un misil iraquí. Al día siguiente algunos medios de comunicación españoles cambiaron, al reproducir sus palabras, el término "apoyan" por "hacen".

Extraído de Memorial de la guerra de próxima publicación en este Blog.

lunes, 14 de abril de 2003

14 de abril

Sólo recuerden.

miércoles, 2 de abril de 2003

Vida en tiempos de guerra

Vida en tiempo de guerra
Durante los últimos diez días no había nada que decir pero si mucho que escuchar, que ver, que leer. La vida del que este suscribe, que no se conforma con la información que dan unos pocos, acaba siendo descrita por el amigo Juan Cueto en El País de una manera realista y veraz, y más que aproximada exacta. (Para los transatlánticos Urdaci es el director de informativos de la televisión pública española). Y así van las cosas: lectura de cinco o seis periódicos, tres cadenas de televisión informativa (CNN, BBC, Euronews) más los informativos vistos de medio lado aquí en España, con más recelo que otra cosa ( las tesis oficialistas de TVE y la guerra espectáculo de Antena 3 ) además del trabajo de Sistiaga y Fuentecilla en Telecinco, digno del mayor de los elogios. Y la cosa se pone peor porque desde hae una hora mi operador de cable ha incluido la señal de Al Jazeera entre mis 45 canales. Aunque a penas se entienden cuatro palabras (Sadam, salam, amarquia, yijad, Bagdad, Basra, amerikanis....) la sensación de haber cruzado las líneas del frente y estar al otro lado es clara.

A esto hay que sumar las crónicas sentidas de Francisco Perejil en El País y en la cadena SER de la que uno no se despega, como tampoco deja de leer Diariodirecto a todas horas, a sabiendas de quién edita las noticias. A pesar de eso, se tiene la sensación de estar desinformado, en la guerra de los periodistas encamados (enbedded) en las fuerzas de invasión, de las imágenes enviadas por videoconferencia por un teléfono móvil, y de la saturación absoluta que no puede esconder la verdad latente del dolor y el sufrimiento de una guerra injusta. Avisaba el Time sobre el creciente poder de convocatoria de las bitácoras personales y del misterio sobre la weblog bagdadí, de Salam pax pero allí también están los brigadistas españoles para seguir con el tema (hay una pareja de mi ciudad entre ellos), una vez que las de los norteamericanos como Kevin Sites o la de Joshua Kucera fueron cerradas por presión monetaria. También ver el punto de vista de un viejo maestro, como Enrique Meneses que no fue a esta guerra, pero la cuenta como nadie.

Toda una obsesión que se interrumpe para ir a las manifestaciones y actos de protesta, y saber si se está informado, y mostrarle a los responsables que pasan por encima de la opinión y los deseos del 91% de nosotros que no estamos de acuerdo y que son cómplices de asesinatos masivos. Pero estas deben de ser las cosas de vivir en una "puta democracia", como dice un concejal del PP de mi ciudad. Por todo ello se entiende el abandono de este Mar Interior, asunto que trataré de remediar, a pesar de la guerra, de la que reniego.

Esto no es un video juego

This satellite image of Baghdad, Iraq was collected by DigitalGlobe's QuickBird satellite on April 1, 2003. President Saddam Hussein called on fellow Iraqis in a written statement on Tuesday to fight U.S.-led invaders but his failure to appear in public stirred more rumors about his fate. U.S. military says forces engaged in major fighting with Iraqi Republican Guard near southern town of Kerbala, a key city on the route to Baghdad. REUTERS/ DigitalGlobe/Handout MANDATORY CREDIT: DigitalGlobe

viernes, 21 de marzo de 2003

Teorías, teoremas y conspiraciones
Cuando las armas hablan, las razones parecen quedar enmudecidas por su estruendo pero aún hay interrogantes que despejar entre el humo de las desinformaciones. ¿Por qué esta guerra? Las teorías que se han escuchado han ido desde lo peregrino ("hay que desarmar a Sadam") a lo cínico ("Los estadounidenses tienen derecho a tener una gasolina barata"), pero una de ellas, relacionada con el euro y la Unión Europea ha llamado la atención de quien esto suscribe. Según esta, tanto Irak, Irán como la propia OPEP estarían tratando de sustituir el dólar por el euro como moneda de pago y de cotización para el petróleo dada la inestabilidad de los Estados Unidos, su elevada deuda externa y déficit público, cosa que la Europa que lideran Francia y Alemania no representan. Así, la asociación anglo-norteamericana no sólo tendría por objeto el control de los precios del crudo, sino la salvación de sus propias monedas frente al rampante euro francoalemán. ¿Y la posición española? La explicación para que el Gobierno español rompiese con una línea diplomática en las relaciones internacionales que abre brechas con Europa, América Latina y el mundo árabe, se debe al compromiso del presidente Aznar a apoyar a Estados Unidos y el Reino Unido a cambio de poder acceder a la información de la CIA y el FBI sobre ETA, con datos que estaría registrándose por medio de la red Echelon, con la intervención de la practica totalidad de las comunicaciones de España, tanto telefónicas como por Internet sobre la banda terrorista. Lo que sí está claro es que la idea del ataque surgió poco después del 11 de septiembre, y se desarrolló durante la campaña de Afganistán con el objetivo de seguir con una política de "construcción de naciones", como hicieron a principios del siglo XX las potencias coloniales, y que comenzó la Administración Clinton con duras críticas por parte de Bush. Pero supongo que la Historia podrá las cosas en su sitio y dará las verdaderas explicaciones.

jueves, 20 de marzo de 2003

El origen de las cosas
Arabia son unos ojos que miran el desierto...

Bromeaba, unos días atrás, Álvaro Ibáñez , diciendo que había encontrado una bitácora que no hablaba de weblogs. Hoy creo que no hay sitio en la red que no hable de la injusta guerra en la que, como siempre, la primera víctima es la verdad. Tendremos pues, que conformarnos con las impresiones, que no informaciones, de los corresponsales de las televisiones, tratando de narrar lo poco visto y oído, encerrados en un hotel en el que suele haber más micrófonos escondidos que periodistas. Es inútil narrar la sensación de vértigo y desamparo que se vive en un país en guerra para alguien que nunca haya estado allí. El que esto suscribe lo sabe, y por tanto, conoce la dificultad de primera mano. Escucharemos conjeturas y veremos cielos verdes bajos los fuegos de los bombardeos. Mientras tanto sólo nos queda la protesta desde este pequeño púlpito o atalaya, según se mire y dejarse mecer por la frenética información convertida en espectáculo en laberíntico zapping por las televisiones del mundo, o refugiarse en el origen de la cosas, y haciendo caso a Vallín , desconectar todo, regresar al cine, y ver en DVD la versión restaurada de Lawrence de Arabia en busca de explicación, mítica en este caso, a todo esto.

miércoles, 19 de marzo de 2003

Futurólogos
En los años setenta que tantas veces queremos recuperar se dio una especie de fiebre en el universo mundo por el futuro, fruto de las incertidumbres de la guerra fría y de la clara conciencia de que la razón no estaba en uno u otro lado del telón de acero. Muchas cosas giraban en torno al devenir, al mítico año 2000 y sus muchas catástrofes, el fenómeno OVNI, las civilizaciones perdidas, la telepatía y los nuevos profetas que nos contasen un futuro más halagüeño que el que nos suponíamos, quizás posnuclear y apocalíptico. Así, proliferaron los reinterpretadores de Nostradamus, los seguidores de San Malaquías, los lectores cabalísticos de la guía de teléfonos o los neolectores del libro de la Revelación; todos dibujaron un futuro que no se cumplió, porque la realidad es tozuda, y el muro de Berlín se vino abajo sin que nadie lo anunciase e Internet se presentó sin conjuros de runas que sirviesen. De ahí, empezó el descrédito de los adivinos, y el olvido gradual de la falsa ciencia, que sólo regresó como material de ficción con el que construir un apasionante episodio de los X-Files. Ahora para saber del futuro basta con leer con atención los periódicos. Tengo ante mí un recorte del diario El País del 29 abril del año pasado, una nota no muy destacada en la sección de internacional, enmarcada, a dos columnas, en la que se aseguraba que la Administración Bush estaba preparando el terreno para entrar en guerra con Irak en un año, aproximadamente, escrita por Javier del Pino que citaba al New York Times . Cuando la leí me pregunté si se habían vuelto locos, que cual iba a ser la disculpa, qué "asunto de qué" se iban a meter de nuevo en guerra. Once meses de diplomacia nos han llevado a este triste punto, en el día de hoy, repleto de incertidumbre. Sólo me gustaría felicitar a quien filtró en abril del año pasado la noticia al NY Times , pero no lo sé, y es una lástima.

lunes, 17 de marzo de 2003

Fusiones
El capital siempre tiene la tendencia a justificarse delante de quienes explota pero insiste en decir que es a esos a quién sirve, y así, lo mismo tratan de convencerte de las intrínsecas bondades de la competencia cuando un mercado se liberaliza, como de los beneficios al "unir sinergias" en una fusión que se acerca peligrosamente al denostado monopolio privado. En ambos casos, los males nunca suelen venir solos para el usuario, cliente o trabajador, al menos, a efectos prácticos. El que esto suscribe sabe de las ventajas de otros sistemas de publicación a parte de Blogger, pero lo cierto es que desde la fusión con Google, las cosas parecen ir a peor. No sólo se duplica la publicidad (¿a alguien más le pasa?), las notas aparecen con caracteres chinos o suben de manera desastrosa (acaba de ocurrirme), sino que es imposible cambiar el código, como desearía, para incluir de nuevo entre los Navegantes a gentes reencontradas como Blip, también Trafalgar Sur o SantaMaradona y también entre las balizas el Weblog de Clarín que lleva Mariano Amartino, nuestro Denken Uber (No imagino nadie mejor), y cambiar algunas cosas del diseño pero por lo visto, está vedado. ¿Quizás temen que les protestemos por la guerra que quieren llevar en nuestro nombre?

sábado, 15 de marzo de 2003

La necesidad de la certeza
Cuando se es joven se necesita creer de manera feroz y radical, con una vehemencia que asusta. Es un mundo de pasiones y odios que lo único que tienen de interesante son su intensidad. En ocasiones tengo la sensación que este patrón se repite con las naciones o acaso, las culturas. Por poner un ejemplo, si un viejo europeo le preguntasen si cree en Dios, se encogería de hombros y sonreiría de medio lado dando a entender que la pregunta no es pertinente; si le preguntasen, por seguir con el ejemplo, si cree en Blancanieves, se encogería de hombros y sonreiría de medio lado dando a entender que apreciaba nuestro sentido del humor. Creo que si le preguntásemos en este momento a George Bush si cree en Blancanieves contestaría sin dudar: “Claro que creo señor, y creo que ella vendrá del bosque con el Príncipe Azul para gobernarnos, y con el tesoro de los siete enanitos para hacernos ricos a todos”. No es el tema el de creer en los cuentos de hadas, si no la necesidad de la creencia, de que el mundo tenga un orden claro, con justicia inmediata, donde las reglas no se salten, con ese rigor y pureza que tienen las cosas en la cruel infancia. Desgraciadamente algunos, como los que se reúnen en Azores mañana, no han salido de ella, para pesar de todos.

lunes, 10 de marzo de 2003

Vulgaridades y emociones auténticas
Pasado el feroz Carnaval, la conspiración de las batas blancas, como un buen amigo ha denominado a la agenda que tengo para el mes de marzo continúa su curso de manera tripartita (esposa, madre, yo mismo) de forma incansable. A esto hay que sumarle una terrible vulgaridad. Damas y caballeros, el que esto suscribe ha contraído una enfermedad común, según una de las doctas batas, "comunitaria", esto es, la gripe, con su panoplia de fiebre, tos, dolor de cabeza y de músculos, en definitiva, una auténtica vulgaridad.

Y vulgaridad es lo de colococarnos un doble banner por parte de los señores de Blogger (¿A que se los quito todos? ¡Será por código!) y que los comentarios estén llenos de cuadraditos, idiogramas chinos, puntos, barras y rarezas varias desde que Goggle entró en Blogger, cuando el se encuentran con una telde o una eñe. Arreglen las cosas señores, no las empeoren.

Y finalmente, gracias Javier Febré , tu amistad me horna.

jueves, 27 de febrero de 2003

Disconformidades, incoherencia y deseos

"Estaba de un tiempo a esta parte incómodo con Mar Interior. La idea inicial con la que fue concebido, la de ser una “carta de navegación”, un testigo de mi paso por la red con los comentarios e impresiones que ese recorrido había hecho en mí, no satisfacía los deseos diarios y se iba tornando más en obligación que en placer, y de ahí al desánimo y a la indolencia y a la más clara de las vagancias restaba un paso. Lo cierto es que las intenciones de un principio fueron, poco a poco, moderadas por el tiempo, la novedad y la necesidad. Y así, se me hacía menos preciso pasar muchas horas navegando por la red y más necesario compartir el mundo real, y dejar de lado el obligatorio deber del Mar Interior, al que ya sabía el tiempo, en minutos u horas, que iba a tener dedicarle cada vez que me proponía subir una nota digna. Cuando el que se compromete es uno mismo, pero el fruto de ello se muestra a los demás, es mejor no llevarlo a cabo a hacerlo mal, desganado o desabrido. La idea del respeto hacía quienes pudiesen leer estas líneas se imponía: antes el silencio que la necedad. Después, graves circunstancias personales, conocidas por muchos, obligaron a dedicar tiempo y esfuerzo a otros avatares, pero eso no exculpa un cierto abandono de unos meses a esta parte si no, más bien al contrario: el hecho de no hacerlo cuando la vida se complicaba demostraba que el Mar Interior era más carga que alivio.

Por otro lado, la red se iba haciendo a mis ojos cada día más aburrida o peor, banal, y de los pocos consuelos que se hallaban se desarrollaban fuera los comunes portales, y sí se centraban cada día más en las páginas personales, de algunos a los que llamo amigos y a otros compañeros. Así pues, vivía la incoherencia de querer continuar con Mar Interior pero sin mantener las reglas que me había impuesto, de vivir más y de contarlo, sin tiempo, de seguir en la red pero sin tener que soportar el aburrimiento que muchas veces me traía.
Finalmente creo haber llegado a un compromiso conmigo mismo que me satisface: escribir todos los días que pueda, comentar lo visto y oído, no preocuparme por las fotos, por los links (¿por qué no utilizar el término amarra?) y usar la primera persona con más naturalidad que modestia; al fin y al cabo, la razón de Mar Interior, que como diría Saramago, es un diario y como tal “una novela de un solo personaje”, es contar, en primer término, de forma pública a quienes me conocen y están lejos, en qué empleo mi tiempo y si lo empleo bien. De nuevo, Saramago en su ‘bitácora impresa’ que son los Cuadernos de Lanzarote asegura que nadie escribe “un diario para decir quién es”. Tampoco pienso mantener un blog para explicar eso, si no, tan sólo para entretenerme y de paso, si puedo, entretenerles a ustedes.
Creyente de las formas y las ceremonias, estoy en tránsito y en transformación, como ya anuncie, para que las intenciones aquí declaradas tomen forma visual, que no física, y los nuevos compromisos se mantengan. Quedo a su disposición."

Como muy tarde, el próximo martes volveré con ustedes.

martes, 25 de febrero de 2003

En dique para mantenimiento
Comenzamos con los cambios. Luego, las explicaciones.
Control de enlaces, etiquetas y funcionamiento.OK
Supresión de enlaces.
Añadir navegantes: "Trafalgar Sur", "Por la boca muere el pez", "Santa Maradona". Reencontrado Blip
¿Eliminar Ciprés en el patio, Korochi, Jazzido, Tintachina? Nota: Lucas cae bien, pero cada vez lo entiendo menos. Lo mismo Ciprés.
Revisar nuevos aspirantes.
(Dejen sugerencias en "Anotaciones")
Cambio color(es) fondo.
Nueva cabecera.
Organización minibanners de estribor: Añadir "No a la guerra" junto a "Nunca mais".
Incluir amarres a MSF y a Greenpeace
Quitar publicidad (¿alguien sabe cómo?)
Rotación fotográfica en principal.
Purga del Template.

Sugerencias y consejos, aquí debajo por favor.


Condenar la máquina
En el lenguaje de la mar se habla de condenar la máquina cuando el motor más a que ayudar al barco en la situación en la que se encuentra puede empeorarla. Y entonces el capitán decide "condenar la máquina" esto es, inutilizar los motores, como pasó en el Prestige. Su puesta en marcha puede hacer aumentar las vibración sobre toda la estructura, debilitarla y finalmente, llevarla a que se parta y, con esto, al naufragio. Es una medida extrema. Se lleva a cabo en momentos en los que no se está seguro que con sólo apagar los motores sea suficiente, porque quizás alguien quiera, pueda u ordene ponerlos en marcha sin atender a las consecuencias, y para evitarlo se "condena", se hace un auto-sabotage. Tal parece con la parada de Vodafone en España, la que quizás acabe por hacer Terra y con la reciente de Blogger/Google , que deshizo buena parte del trabajo de los últimos días, llevando a algunas bitácoras a un pasado relativista, mientras su máquina seguía condenada. Es un buen momento para reflexionar sobre algunas cosas de este Mar Interior, de sus pretensiones y objetivos, de lo que es y de lo que quiere ser, de a dónde se encamina y para qué sirve, de si la máquina debe ser condenada o no. Hay aún mucho que contar.

jueves, 20 de febrero de 2003


Pregunta/propuesta
Todos nos bajamos música de la red, aca los primeros. Más allá de consideraciones sobre los derechos de autor y las ruedas de molino con las que nos quieren hacer comulgar las discográficas, parece que es un medio de difusión de la cultura que está todavía por explotar. Mar Interior usa WinMX cosa que no sabe si es oportuna o la mejor, pero es el que tiene. ¿Deberíamos seguir con él o existen alternativas de más calidad? Ahora ha caído en sus manos un programa que transforma los contenidos de un CD en MP3 y desde estas costas nos preguntamos: ¿qué les apetece que pasemos a ese formato (por supuesto a más de 192) y pongamos a disposición de todos ustedes? Todas las peticiones serán atendidas, si fuera posible, aunque la discoteca de aquí en más bien clásica, como supondrán, aunque heterodoxa.

miércoles, 19 de febrero de 2003

Lema
El señor oscuro trató de dominar la Tierra Media con el poder de sus dos torres...

De lo obvio hablar es superfluo. El "No a la Guerra" es claro y suscrito por estas costas. Según unos y otros parece innegable que al menos cinco millones de españoles salieron a la calle a protestar contra esta guerra a la que el Gobierno de Aznar quiere llevarnos a hacer a lomos del caballo americano. No sólo es inmoral, sino ilegítimo. En la manifestación a la que asistí había más de 100.000 personas: esto es, que uno de cada diez asturianos se fue a protestar, y se dice pronto. De todas las pancartas que salieron el 15 de febrero a la calle pidiendo paz, una observada en las calles de Nueva York fue la que más llamó la atención a este editor y por eso se menciona hoy aquí. Llevaba escrito en inglés (traduzco): "Frodo ha fracasado. Bush tiene el anillo".


Pasiones de periódico
Se dice que no entra en los cánones de la cortesía de las bitácoras, y que muchos empezarán a pensar que a este editor le mueve más el afecto que la objetividad pero el ensayo del Cinexín sobre las películas de periodistas es magnífico. Y se lo debemos al gran Vallín, de los Vallín y Pérez de Colunga detodalavida; y eso a pesar de la crisis.

lunes, 10 de febrero de 2003

Cumpleaños

Para Erika, para Susana, para mí. Para Elena mañana

Que tengas un buen día,
que la suerte te busque
en tu casa pequeña y ordenada,
que la vida te trate dignamente.


Life Vest Under Your Seat

Señores pasajeros buenas tardes
y Nueva York al fondo todavía,
delicadas las torres de Manhattan
con la luz sumergida de una muchacha triste,
buenas tardes señores pasajeros,
mantendremos en vuelo doce mil pies de altura,
altos como su cuerpo en el pasillo
de la Universidad, una pregunta,
podría repetirme el título del libro,
cumpliendo normas internacionales,
las cuatro ventanillas de emergencia,
pero habrá que cenar, tal vez alguna copa,
casi vivir sin vínculo y sin límites,
modos de ver la noche y estar en los cristales
del alba, regresando,
y muchas otras noches regresando
bajo edificios de temblor acuático,
a una velocidad de novecientos
kilómetros, te dije
que nunca resistí las despedidas,
al aeropuerto no,
prefiero tu recuerdo por mi casa,
apoyado en el piano del Bar Andalucía,
bajo el cielo violeta
de los amaneceres de Manhattan,
igual que dos desnudos en penumbra
con Nueva York al fondo, todavía
al aeropuerto no,
rogamos hagan uso
del cinturón, no fumen
hasta que despeguemos,
cuiden que estén derechos los respaldos,
me tienes que llamar, de sus asientos.

Luis García Montero

domingo, 19 de enero de 2003

Pensamientos encontrados entre la vajilla
Lavando los platos.

Decía Steve Reich que el mejor de todos era Bach, que servía para todo, para ir a recoger los niños al colegio, hacer el amor, fregar los platos, que cosa eso de fregar los platos, ¿por qué no hacer las camas? No me gusta hacer las camas y sí fregar los platos, como a Leonard Cohen que decía que era una de las cosas que sabía hacer bien, que bueno, a pesar de los años, lo de hacer el pino le salía decente y que las canciones hablaban por sí mismas, y en eso hay poco que decir ni que contar, porque creo que acaba siendo más importante hablar de la demora de un tipo mientras friega los platos (¿Podrá la red sustituir al lavaplatos? ¿el lavaplatos al hombre?) que estar hablando de la guerra en ciernes, la corrupción en el Sporting, el chanchullo que han montado Luis Sepúlveda, que fue mi amigo, para su mujer, creo que yo intuía que algo así podría pasar aunque Carmen siempre fue cálida con nosotros, pero Luis tiene alma de chacal y mira con deseo de “carne de hembra”, como decía mi abuela con esa forma tan explícita y visceral, sabiéndose objeto que no persona, esa manera de mirar que recordaba de jovencita cuando las “moros” llegaron a su pueblo durante la Guerra Civil y recorrieron las “caleyas” vacías, que las mozas estaban escondidas por temor a lo que podría pasar y pasó, pero mi abuela se libró y siempre contaba lo de la manera de mirar de los legionarios, y entonces Paco Taibo me pregunta si eso pasó en el 34 o el 37, y no sé que decirle, pero me cuenta que su padre está muy mal de la vista pero más animado, que tiene una chica que le lee y que el viejo Paco sigue unido a la vida, y me acuerdo del rostro de Borges cuando le ví en Sevilla, paladeando las palabras como si estuviesen hechas de tigres, laberintos, chocolate, estelas, mango, trufas, oporto, venado como el que debe de haber en estos días en Villablino, recién cazado, y no nunca hubo allí un aeródromo para el autogiro del general Solchaga, y casi parece la aliteración recién descubierta al leer en inglés el comienzo de Lolita “luz de mi vida, fuego de mis entrañas”, que es prodigiosa, como la capacidad del calentador de apagarse cuando tienes las manos llenas de espuma y todo por aclarar.

lunes, 6 de enero de 2003

In memoriam (1924-2003)
In Memoriam.

Hace dos días mi padre murió. Nadie lo esperaba, aunque su muerte no fue repentina. Llevaba una semana en el hospital con una insuficiencia respiratoria que no fue capaz de superar. Hoy sigo manteniendo ese “sentimiento roto” del que hablaba Leonard Cohen. Mi padre se llamaba Rogelio y vivió una vida difícil: una revolución en la infancia, la Guerra Civil en la adolescencia, la posguerra. Era hijo de madreñero, de un artesano, con carnet del Partido Comunista, que malvivía fabricando esos zuecos de madera que se usaban en Asturias para caminar sobre el barro. Aquel, mi abuelo, luchó en todos los conflictos posibles y murió de enfermedad y agotamiento. Sé que la vida que dio a sus hijos no fue justa ni digna, que rozaba la brutalidad, y también sé que mi padre se sobrepuso a eso y encontró consuelo en la fé católica, algo que yo no comparto ni compartía con él. En los cuarenta, tras dos años de miseria, frío, hambre y miedo, enfermo en un hospital para tuberculosos, desahuciado por muchos médicos, mi padre se curó tras una durísima operación, aunque arrastraría siempre un dolencia crónica pulmonar. Poco más tarde ingresaría como numerario en el incipiente Opus Dei. Tras casi veinte años, por lealtad a un amigo al que la Obra había abandonado a su suerte, mi padre pidió la dispensa papal para romper los votos que lo habían ligado a ellos. Nunca le hostigaron tras su salida, pero mantuvieron con él, hasta el último instante una actitud amable, recelosa y expectante: quizás sabía demasiado. Le propuse que escribiésemos un libro sobre esos años de la gran expansión del Opus Dei, de los primeros oblatos, pero siempre se negó. Era leal con los viejos compañeros, aunque no entendió nunca la subida a los altares de San Josemaría Escribá. Después, en el 68, conoció a mi madre, y en el 69 nací yo, que le daría bastantes disgustos y algunas satisfacciones. Tras su jubilación, hace ya casi 14 años, se dedicó a ayudar a los demás, colaborando en Cáritas, y también en De hermano a hermano, con una actividad que superaba con mucho la de sus años como funcionario. Siempre fue independiente y activo, inteligente e informado, consciente y reflexivo, con una sed intelectual inagotable, profundamente cristiano, católico, apostólico y romano, y como tal, murió. Descanse en paz.