martes, 26 de noviembre de 2002


Tramo cerrado al tráfico marítimo por vertido de fuel.

Volveremos en cuanto les saquemos el petróleo a los percebes.
Trabajamos para usted.

Disculpen las molestias.

viernes, 15 de noviembre de 2002

Sin imágenes, casi sin palabras
No he querido mirar. En ocasiones siento que el sufrimiento mostrado se convierte espectáculo, pero lo he oído por la radio con palabras bien claras: hay niños en Argentina que se están muriendo de hambre. Su aspecto, cuentan, es el de tantos niños, tantas veces vistos, que agonizan en las hambrunas endémicas que hay en tantos países de África o en la India. Las condiciones en Argentina son diferentes. Hechos así no sólo deberían de ser inconcebibles sino imposibles. La Argentina tiene una superficie equivalente a la de la India y unos 40 millones de habitantes, no más de mil millones. Deberían detener al Gobierno de la Argentina, a su presidente, a los gobernadores provinciales por genocidio, por crímenes contra la humanidad. Los militares mataban y torturaban en los garajes, por acción. Ahora se tortura y mata por omisión. Las pruebas contra ellos son evidentes. Recojamos firmas, inundémonos sus buzones, señalémoslos cuando salen a la calle, sentémoslos en un banquillo, esposados, delante de un juez.

jueves, 14 de noviembre de 2002

¿Qué es Europa?

Quizás un lugar en el mundo donde la gente se mataba a millones durante todo el siglo XX, quién sabe, pero las recientes declaraciones del ex presidente de la República Francesa Valéry Giscard D'Estaing anunciando, reconozcámoslo, en un estilo muy francés, que la entrada de Turquía en la Unión Europea sería el fin de "Europa" llaman a la búsqueda de una definición que no puede pararse en los días de la Guerra Fría y aquello que se llamó el Comecon, y que tampoco puede quedar en un juego de mercaderías, una sociedad de economías opulentas o un club de decadente aristocracia. La polvareda ha sido considerable, pero lo cierto es que la definición no es fácil. Ya se defendió aquí, con el famoso y en el fondo chusco caso del islote Perejil que es la Historia y no la Geografía es la marca las fronteras. Con esa premisa, Turquía no sería un país europeo: al fin y al cabo se acabó con ellos y su imperio en la I Guerra Mundial, y aunque tengan una parte de su país en el continente, no se puede decir que pertenezcan a él: parecen extraños, son musulmanes.

... y sigue... Giscard D'Estaing insinuaba la “cristiandad” como lugar común; no creo que sirva para los millones de ciudadanos que no han crecido bajo esa cultura, emigrantes o hijos de emigrantes de viejas colonias, con su pasaporte color burdeos, y recordemos a los judíos, o los gitanos, tan europeos a fuerza de ser perseguidos. Un buen amigo aseguraba al respecto, citando a otra persona, pero añadiendo argumentos, que lo que nos definía era la Ilustración, las ideas del estado-nación, los derechos individuales, la democracia. El argumento era certero pero demasiado amplio: eso es lo que une a lo que llamamos Occidente, porque todos somos o debemos ser hijos de la Revolución Francesa y de la Declaración de los Derechos del Hombre, idea que acaban por impregnar y forma parte de la identidad no sólo de toda Europa, sino de Australia, de Nueva Zelanda y por supuesto, América, desde Alaska a la Tierra del Fuego, aunque esas ideas no se hayan logrado poner en práctica al completo a pesar de los años. Quizás Europa, a pesar de ser fraccionada la idea inicial sea Roma o los valores de Roma o mejor dicho, la cultura grecolatina frente,: con sus leyes que aún perduran y base de todas las que tenemos, sus interminables discusiones, una multirreligiosidad muy laicista, la idea de la ciudadanía como derecho, que se mantuvo en esta parte del continente durante 500 años y en el otro lado, durante 2.000, hasta que Constantinopla cayó y los otomanos tomaron el poder pero no cambiaron las formas ni las leyes. Entonces ¿qué es Europa?

lunes, 11 de noviembre de 2002

Cita encontrada al pie
El mundo siempre tan lleno de tentaciones...

“No saben, a menos que sea hombre de gran ingenio y virtud; y no es razonable que, habiendo vivido siempre como simple ciudadano, sepan mandar; no pueden porque carecen de fuerzas que les apoyen y sean fieles. Además, los estados que surgen de repente, como todas las demás cosas de la naturaleza que nacen y crecen deprisa, no pueden tener las raíces y ramificaciones correspondientes; de manera que la primera adversidad los destruye”.

El Príncipe, Nicolás Maquiavelo

viernes, 8 de noviembre de 2002

Negación de la filosofía (moderna) en dos partes
Esto es una imagen digital, no un ojo, ni un metaojo con gafas, ni un órgano metafórico que aparenta mirarte ...

Recientemente, mientras revisaba los restos de un conocido naufragio, hecho que había advertido Paulanet, en otra cala encontré un artículo malintencionado y bochornoso, tanto en forma como en contenido, respondiendo a una reseña literaria que había hecho tiempo atrás un buen amigo periodista, compañero de algunos de los que leen estas líneas y al que siempre tuve y tengo en estima y aprecio profesional. Lo curioso es que el artículo originario de esta polémica era una reseña crítica que no negaba elogios ni valía al encausado, pero sí denunciaba la vacuidad de su último libro. Según este amigo periodista, el autor se regodeaba en unos centenares de páginas para no acabar diciendo otra cosa que la recogida en el título del volumen, que no mencionaré, y de cuya autoría se hacía responsable un conocido filósofo. Una reseña hecha con interés y rigor, de alguien que había leído el libro, asistido a la presentación del mismo y contado lo visto, oído y entendido a su leal saber y entender. Lo curioso del caso, y este es el motivo de reflexión, fue la respuesta, cercana al libelo, efectuada en una publicación marginal de la red, patrocinada por el agraviado, en la que se dedicaban a insultar al redactor, desprestigiar su carrera profesional, descalificarlo por haber estudiado en una determinada universidad, y todo por cometer el periodístico pecado de haber efectuado tal reseña, firmada con su nombre, y con una dirección de correo electrónico al pie, a la que, huelga decirlo, no llegó ninguna carta sobre el tema. Sí, la nota insultante llevaba firma, de alguien, según se podía entrever de la cuadra del filósofo en cuestión o de sus aledaños y quien decía ser, terrible, licenciada en filosofía.

... y sigue: No entendí a qué venía esa rabia y desprecio, ese ardor impudoroso, ese odio biliar, pero me sorprendió, durante unos segundos, que viniese de alguien que mostraba como máximo logro una licenciatura a la que se presuponen, al menos, el manejo de los argumentos y no de los insultos. Rápidamente, este navegante se recompuso, y recordó la frustración de años pasados al descubrir la muerte de la filosofía tras los siglos, al ser sustituida por la física, la medicina, la economía, la astronomía, las matemáticas, la biología o la neurología, ciencias sometidas al método y no meras disciplinas teóricas. El contra-artículo, en la mejor forma de la contrarreforma, era hueco e insultante, y confirmaba los peores temores del que esto suscribe al desvelar que al filósofo no sólo le falta campo al que cerrar con una cerca categorial, si no que demuestra que la aparente armazón de análisis de la realidad ofrecida hasta la fecha es un castillo de naipes construido con jerga, humo, citas al pie y referencias endogámicas, que ayudan a perpetuar los que encuentran en la universidad y sus sectas un hogar cómodo con el que llenar la vacuidad de sus vidas pero que no compensa su afán de notoriedad en una sociedad demasiado inteligente o alienada como para hacerles caso. Quizás sea un análisis demasiado farragoso y localista el aquí ofrecido, así pues les propongo que si están en Argentina sustituyan filosofía por psicología, (otra variante sería la de los economistas, también para los chilenos) o en México, por antropología, y estaría dispuesto a suscribir todo lo dicho con esos términos, al menos, a modo de provocación.

jueves, 7 de noviembre de 2002

El penúltimo de los mitos
Lo apearon...

Cayó Varsavsky, un mito, o como lo definen los amigos de DiarioDirecto "el ídolo de la nueva economía". Un enrevesado asunto financiero (bonos, fondos, créditos) le dejaron fuera de su juego en su empresa, pero no creo que con los bolsillos vacíos. Ahora es sólo un accionista más de una compañía telefónica, Jazztel, que trata de fusionarse con otra, Uni2, mientras que la causante de esa caída y de otras, Telefónica, mira para otro lado y sonríe por los bajo. El monopolio, si no es público, siempre es malo. En el otro caso hay excepciones y razones, pero temo estar entrando en un debate abierto en Denker Über y no es el caso, ni la intención. Lo cierto es que Telefónica es una gran especialista en poner las cosas difíciles cuando se tiene que usar su red para competir en un mercado que se liberalizó a regañadientes. Es imposible estar en la calle vendiendo un producto más barato de lo que te cuesta, pero ese no es el asunto. El tema es el ejemplo de Varsavsky y lo mucho que representa; el prestidigitador que creó de la nada una compañía de teléfonos en España, con una de las publicidades más inteligentes que se han visto en años, y luego un emporio de contenidos para la red, con mucha gente que puso ilusión y trabajo, Ya.com, y que fue finalmente vendida a T-Online cuando tocó el tiempo de soltar lastre, despejar el humo, esconder el botín y saltar por la borda, antes de que todo se hunda. No es el único caso. Algún día hablaremos de Terra o de las cuentas de Eresmas antes la fusión con Wanadoo. Y no es sólo un tema de economía, aunque no lo parezca. O sí.

miércoles, 6 de noviembre de 2002

El triunfo de los asesinos


Citaba, quizás Ricardo Corazón de León o Millán Astray, tanto da, aquello de “matadlos a todos, Dios escogerá a los suyos”, y la cara que viene a la memoria inmediata es la de Putin defendiendo su acción en el teatro de Moscú contra los terroristas. Los rostros se solapan con el de Fujimori vestido de Rambo entrando en aquella embajada en Lima, o con la imagen del fuego invadiendo la embajada española en Guatemala, para volver con Bush, bombardero de bodas y banquetes (¿existirá algún iraquí, iraní, persa, norcoreano, sudanés, afgano, palestino, por casualidad, bueno?), hoy fortalecido tras su triunfo en las elecciones (¿será pues necesario ya atacar a Irak?). Engrandecido por su pueblo como el incalificable Vladimir Putin tras gasear a los rehenes, en la mejor tradición de los gases y los campos, digno representante de aquello que Antonio Muñoz Molina llamaba, y aquí lo recogíamos, “un fondo leninista de falta de compasión y de falta de respeto por la vida humana”. ¿Será el presidente Bush el adalid de un leninismo capitalista de tercera vía?

lunes, 4 de noviembre de 2002

De vuelta


Tras unas gozosas semanas de alejamiento, Mar Interior regresa a la actividad, con nuevos proyectos que poner en marcha, y algunas modificaciones a efectuar fruto de nuevas ideas y experiencia. Este es sólo un anuncio de lo que vendrá, pronto. Enviamos nuestro afecto a aquellos que nos extrañaron.